martes, 2 de agosto de 2011

UN LIBRO Y "LOS INTELECTUALES"


Lo primero es lo primero. Terminada la presentación del libro fuimos a adquirirlo. "Se agotó" es la respuesta de quien lo vendía. Buen síntoma.  Felizmente Fidel Mujica accede a prestarnos su ejemplar de "Te han quitado la promesa de ser viento . Imaginarios del ser , de la ciudad y del tiempo en Rockdrigo"  de Abilio Vergara Figueroa y Ricardo Pérez Rovira presentado  el 21 de julio en el CC UNSCH a sala llena.

Se  habló del tiempo. Corto,  el empleado por Boris Peña Morales, primer comentarista. Extenso, el usado por Pilar Béjar Romero, segunda comentarista.  "Son estilos de comentar" escuchamos tras nuestro. Seguramente.  Sin embargo valoramos los minutos dedicados a conocer parte de la "vida y obra"  de Rodrigo González "Rockdrigo" , mexicano y rockero. Su paso de Tampico a la metrópoli Ciudad de México. Su producción musical. Droga. Rehabilitación. El terremoto que acabó con su vida. El rock como medio de protesta.

Y no podía faltar el rock . Dos intervenciones del grupo "Natural" , si la memoria no nos falla. "Estación del Metro Balderas" y "Los intelectuales".

Reconocimientos para el autor. Por ejemplo : "Cada año que vuelve a Ayacucho nos trae un libro" o "no es profeta en su tierra". Es simplemente , destacando su humildad, ABILIO VERGARA FIGUEROA.


LOS INTELECTUALES ( x  Rockdrigo)

En un lejano lugar ,
retacado de nopales,
había unos tipos extraños
llamados intelectuales.

Se la pasaban leyendo
para ser sabios y doctos,
pues no querían seguir siendo
vulgares tipos autóctonos.

Los veías en los cafés,
llenos de libros profundos,
y en eventos culturales ,
olían conciertos rotundos.

Constantemente escribían
poemas y cuentos cortos,
y aunque no los comprendían,
se quedaban como absortos.

Si veías tal escritura,
te sentías medio atontado,
porque con tal estructura
te ibas bien apantallado.

No sabías si eran marcianos,
mexicanos o europeos,
ángeles, diablos o enanos,
cardíacos o prometeos.

Y así, estos tipos extraños
siempre estaban cavilando,
y hasta cuando iban al baño,
se la pasaban pensando.

Pensaban cuando comían,
en la esquina, en el avión.
Pensaban cuando dormían,
pensaban en el camión.


Y entre tanto pensamiento,
análisis y estructura,
decían conocer la neta
y hasta también la locura.

Pero al llegar a su casa,
se liaban con su mujer,
sintiéndose de otra raza,
nunca daban pa’ comer.


Dr. Abilio Vergara Figueroa

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