martes, 27 de diciembre de 2011

UNA ESTAFA MÁS, SI IMPORTA TOMAR EN CUENTA




Gudelia Machaca Calle

La lucha por recuperar el lote 88, tras la entrega ilegal al Consorcio Camisea, se remonta al gobierno de Alejandro Toledo, quien sin respetar una norma de mayor jerarquía (ley 27133) entregó al Consorcio Camisea mediante el Decreto Supremo 050-2005-EM y su modificatoria el 006-2006-EM, poniendo en riesgo el consumo interno de los peruanos. La exploración del lote 88 no le demandó ningún gasto al Estado Peruano, sino a otra empresa (Shell) que en lugar de encontrar petróleo encontró gas y a falta de tecnología necesaria para transportar y exportar le entregó al Estado peruano.

Así el lote 88 se convirtió para los peruanos, en un maná caído del cielo, por lo mismo que se dispuso sería para consumo interno y con un precio razonable. Empero, Alejandro Toledo y el lobista Pedro Pablo Kushinski, Presidente y Ministro de Economía de entonces, respectivamente, mediante los famosos Decretos Supremos 050-2005-EM y 006-2006-EM, coronaron su felonía en contra de nuestro país, al entregárselo ilegalmente el preciado lote 88 al Consorcio Camisea; a su vez éste, hasta tuvo la insensatez de hipotecarlo en un crédito obtenido.

En ese escenario, Alan García, que candidateaba a la presidencia de la república en las elecciones del 2006, engatusó a un sector del electorado con su discurso de doble cañón que de ganar las elecciones, recuperaría el lote 88 para los peruanos. Ya en el poder, García, no sólo hizo lo contrario a su promesa electoral, sino engañó por segunda vez, por cuanto el desenlace de la lucha que tuvo que enfrentar con los cusqueños en contra de los Decretos entreguistas, terminó en eso, en otro engaño. Fiel a la demagogia barata que practica, García había anunciado la derogatoria del Decreto, que nunca se hizo efectiva porque la empresa transnacional y los lobistas como PPK, adujeron que por mandato constitucional los contratos ley no podían derogarse y de eso era consciente Alan García; pero el anuncio de la derogatoria le sirvió para librarse de la furia de los cusqueños. Recordamos que esas deliberaciones se hicieron en sólo uno o dos medios de comunicación de oposición, pues la mayoría de la prensa oficialista no lo resaltó y prefirió mantener desinformada a la población peruana.

Era la herencia fujimorista que nos había dejado una constitución neoliberal a ultranza que sirvió de coraza para que el Consorcio Camisea se sintiera protegido y tranquilo. Sin embargo, sirvió para poner en evidencia que “derogado” el Decreto no había ninguna ley que sostenía al contrato del Consorcio Camisea, pues la ley 27133 la única que existía establecía lo contrario (reservaba el lote 88 para consumo interno).

Aunque suene una barrabasada, a pesar de todas estas aberraciones jurídicas, el gobierno aprista luego el nacionalista, se enfrascaron en una “negociación” para encontrar un entendimiento con el Consorcio Camisea que no avizoraba ninguna solución, por lo que había quedado diferida la negociación. ¿Hasta cuando los peruanos teníamos que haber esperado que culmine la negoviación?, seguro una eternidad. Pero, gracias a que los magistrados de la Sala Civil de la Corte de Lima, demostrando que todavía queda reserva moral en esta institución tan vapuleada, fallaron a favor del Estado Peruano, al declarar NULO por INSCONSTITUCIONALIDAD a los Decretos 050-2005-EM y 006-2006-EM, pues siendo normas de menor jerarquía al de la Ley 27133, había entregado el lote 88 al Consorcio Camisea. Pero, para todos cuantos amamos a nuestro país, cuál sería la peor demostración de felonía del actual gobierno? Haber apelado el fallo, a través del Procurador del Ministerio de Justicia. Lejos de reivindicarse ante el pueblo peruano ya que fue una de sus promesas electorales de Humala de recuperar el lote 88 para consumo interno, y no sólo el 88 sino también el 56, este gobierno apeló el fallo de la Sala Civil. Algunos han sostenido que el Presidente Humala no está enterado de lo que ha hecho el Procurador, si eso es así, entonces ya no es Ollanta Humala quien está a la cabeza del gobierno, sino el Premier del Consejo de Ministros y su Ministro de Economía, con los hilos que los maneja desde la derecha y poderes económicos extranjero y nacional, y eso si sería mucho más grave.

La estafa de los candidatos cuando se convierten en gobiernos de nivel nacional o sub nacionales, sí importa poner en evidencia para seguir tomando conciencia de nuestra realidad y expectorar a los estafadores de la política. Tan sólo hacer mención, por ejemplo, en caso del gobierno regional de Ayacucho, cuando de candidato se desgañitaba el actual presidente en decir que los procesos de licitación serán transparentes, limpias, públicas; ahora ni siquiera son licitaciones las que se realizan, sino mañosamente, se exoneran procesos de selección con la complicidad de un grupo de consejeros, para manejarlos directamente a discreción de funcionarios pagados por PNUD, como profesionales A1, pero contrariamente lo que han demostrado durante el presente año es ineficiencia e ineficacia en el manejo del gasto público. ASI ES LA ESTAFA DE LOS POLITIQUEROS.









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