Gudelia Machaca Calle
La campaña
de descrédito a las organizaciones sociales y sus dirigentes es el común
denominador en Cajamarca, Espinar, y como no, también, en Ayacucho. El gobierno,
la DBA (derecha bruta y achorada), las empresas transnacionales, los medios de
comunicación y periodistas alineados al poder económico y político de turno son
los encargados de esta maquinaria de demolición. Contrario sensu, lo que
demuestra esta reacción desesperada, es el temor al pueblo organizado.
La población
tiene que estar vigilante frente a la pretensión del gobierno de, previamente,
“calificar” a qué organizaciones considerará validas para interlocutar o llamar
a una mesa de diálogo. Esta pretensión es desconocer la dinámica social.
La
criminalización de la protesta popular, creación del gobierno aprista e
implementada por el régimen humalista, ha empezado a funcionar; dirigentes, líderes
sociales, alcaldes como el de Espinar o Presidente Regional como el de
Cajamarca, denunciados por todos los delitos establecidos como parte de esa
política de criminalización, y en un “concierto” entre la policía, fiscalía,
poder judicial, y no creo al margen del poder político, se trajeron abajo
principios constitucionales como el de Juez natural, y por decisión del Presidente del Poder
Judicial César San Martín, se implementaron jueces supranacionales en Lambayeque,
Ica para juzgar al alcalde de Espinar Oscar Mollohuanca y a todos los
denunciados en los sucesos que puedan producirse en Cajamarca, Cusco y quizás
en otros lugares, como Ayacucho, donde el pueblo organizado lucha en defensa
del agua, la vida, el medio ambiente, sus recursos naturales, su soberanía y
seguridad alimentaria. El mayor argumento para el máximo representante del
poder judicial “es que no hay garantías para el juicio”.
El caso
Espinar es la real demostración que el pueblo sí quiere dialogo, sí tiene
propuestas y alternativas y ha buscado ese dialogo con la Empresa Xtrata Cooper
Tintaya, y con el Gobierno desde hace más de cinco años; documentos, cartas,
oficios, viajes en busca de los decisores del país, pero nunca fueron
escuchados y cuando la indignación del pueblo de Espinar se manifiesta en
protestas, el gobierno responde con bombas, balas y muertes. En el caso Conga,
si el gobierno no accede a un dialogo real, transparente y no respondiendo a dictados
de los poderes económicos internos y externos,
el resultado podría ser mucho más trágico que el de Espinar.
¿Qué
relación existe entre Cajamarca y Espinar con el caso Ayacucho donde la Empresa
Rio Plata SA. pretende explotar minerales en la cabecera de cuenca del rio
Cachi?. Mucho; desde hace dos años se
viene denunciando acciones irregulares de empresas como Catalina Huanca, Newmont,
Cooper Corporation, y que la zona sur de Ayacucho está prácticamente
cuadriculada por concesiones mineras, incluida la cabecera de cuenca del Rio
Cachi. En foros, certámenes, como el que se desarrolló hace, aproximadamente
dos meses, en Chuschi, se viene alertando el peligro que existe que la Empresa
Rio Plata S.A., explote en la cabecera de cuenca del rio cachi. La exigencia va
más allá, que las cabeceras de cuenca sean declaradas zonas protegidas conforme
a la Ley de Recursos Hídricos; se trabaje en el ordenamiento territorial, en la
zonificación ecológica y económica; ninguna ha sido respondida hasta la fecha.
Hace más de un mes la Autoridad Local del Agua – ALA, ha remitido oficios al
Presidente Oscorima, al Presidente del Consejo Regional y otras instancias para
que con la intervención de los sectores correspondientes (Agricultura, Salud,
Vivienda, etc.), inicie con el procedimiento para declarar las cabeceras de
cuenca como zonas protegidas, pero tampoco a esto la gestión Oscorima ha
respondido. Sin embargo, el mandatario regional sigue achacando que el FREDEPA
y demás organizaciones sociales, son “retrógradas”, “antimineros”, “enemigos
del desarrollo”, “saboteadores”, “que lo único que saben hacer es protestar y
protestar”.
En artículo
anterior señalamos que el pueblo peruano, ayacuchano lo que rechaza no es a la
inversión privada, ni a una minería responsable, sino a la minería no
planificada que se practica en nuestro país, a falta de un ordenamiento
territorial, a una minería que contamina el medio ambiente, mata su flora y
fauna, atenta contra los derechos de sus pobladores, los mantiene en la pobreza
y extrema pobreza, a que no se implemente una real y transparente consulta
previa. Un comunero de Espinar para Hildebrandt en sus 13, declaró lo
siguiente: “Tenemos 30 años con la mina y no contamos con una carretera
asfaltada, hay extrema pobreza en la comunidad… hay muertes de animales y las
chacras no producen… El agua que sale del cerro donde está la relavera y que
cae al canal de irrigación tiene feo olor, no se puede tomar ni usar para lavar.
Cuando tomamos agua inmediatamente nos duele y arde el estomago, tenemos que
traer agua de Yauri. Queremos escapar de acá. Tengo 56 años y me veo como de
80. La empresa nos da avena para corderos y cura el ganado, pero cuando no les
dan las medicinas las vacas abortan”. Declaraciones que nos releva de cualquier
otro comentario… ¿esperamos que esto suceda con el caso de la cabecera de
cuenca del rio cachi?; pero no, para Oscorima, el pueblo, el FREDEPA no tienen
razón, son saboteadores, retrógradas y son cuatro amigos; lo único que
demuestra con su proceder, es odio de clase, y algunos periodistas ya se
quitaron la careta y abiertamente justifican al mandatario regional en el trato
al FREDEPA y las luchas del pueblo, aduciendo “si pues el FREDEPA está débil y
da pie que Oscorima los califique así”; débil están ellos en principios y
convicciones, y falta saber si es por ignorancia o por conveniencia.
El paro del
31 de mayo, pacífico, cívico, con miles marchando por las calles ayacuchanas,
con paro seco del servicio público urbano, los tres más grandes mercados
cerrados, sin clases en centros educativos, con sus docentes marchando en las
calles, con estudiantes de la UNSCH vitoreando en defensa del agua, la vida,
contra la corrupción institucionalizada, con trabajadores sindicalizados
portando carteles con frases alusivas ¡No a Conga!, ¡No a Rio Plata!, con
delegaciones de madres de familia integrantes del FEDECMA, con delegaciones de
la FADA, JUDRA, y otras organizaciones en un paro preventivo, es un éxito para
el FREDEPA, para el pueblo organizado, obvio hay la necesidad de seguir
fortaleciendo al FREDEPA, a la FEDECMA, JUDRA, FADA, CGTP, que para la medida
concreta y otras luchas del pueblo, trabajarán coordinadamente en una, también,
llamada Coordinadora, que bajo ninguna circunstancia desconocen ni desconocerán
la jerarquía del FREDEPA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario