domingo, 16 de octubre de 2011

CASO INIA: EN SU TRAMO FINAL



Gudelia Machaca Calle (*)

Reza el dicho que “no hay bien que por mal no venga”. En efecto, el problema generado por la gestión anterior aprista y la gestión actual del G obierno Regional de Ayacucho respecto a los terrenos del INIA, está arrancando compromisos al Ministro de Agricultura de que esta vez sí el trabajo de investigación de la Estación Experimental Agraria CANAAN-INIA será reflotada, fortalecida y entendemos con una asignación presupuestal mayor a la que recibe, de lo contrario de sólo compromisos y promesas no se hace absolutamente nada.

Anuncios oficiales del trato directo entre el Ministro de Agricultura Gailux y el Presidente Regional Oscorima, aun no se conocen; sólo versiones extraoficiales de uno y otro lado, pues una de las condiciones para la continuidad del trato directo, que también sabemos extraoficialmente, es que se abstengan de ambas partes revelarlos mientras no culmine el trato directo y el trabajo que viene realizando una Comisión integrada por representantes del MINAG, INIA y el GRA de cuyos resultados se podría conocer en el transcurso de la próxima semana.

Sin embargo, de las informaciones a las que tuvimos acceso podemos dar cuenta que es un hecho que las 5.1 Has. para la construcción del futuro hospital será transferido al Gobierno Regional de Ayacucho Ese espacio es que el MINAG había entregado al Ministerio de Vivienda para los moradores damnificados del cerro La Picota producto del aluvión del 2009 el que no se materializó por negativa de los propios damnificados. Esa área sería propicia para la construcción del futuro hospital por su relativa lejanía al Aeropuerto y el Cementerio. Asimismo, es un hecho que el Campo Ferial de Canaan, de aproximadamente 9 has., en posesión desde hace ya varios años por el GRA, será formalizada su transferencia a favor del GRA.

Igualmente, según las informaciones a las que tuvimos acceso, en los 2 casos señalados no existieron reparos de ninguna de las partes y habría quedado ya zanjado; el asunto que quedó por definir y en eso vendría trabajando la Comisión, es con relación a la solicitud del Presidente del GRA para que el MINAG le transfiera 5 has. más colindante al del futuro Hospital, Comisión que vendría evaluando respecto a la pretensión del Presidente para solicitar esas 5 has. adicionales.

Si el trato directo está en el nivel que hemos señalado, ya nos permite ensayar algunas conclusiones:

En primer término, las cerca de 32 has. de las 35 has. de terreno que posesiona el INIA, que el GRA se hizo “propietario” en un proceso irregular, por fin fue reconocido por el Presidente del GRA y sus asesores, por lo mismo que no debían ni podían seguir defendiendo esa ilegalidad, y lo único que quedaba y desde aquí así lo auspiciamos, era el trato directo entre el GRA y el MINAG para enderezar el entuerto que el GRA, sus asesores y la gestión aprista habían generado.

Segundo, el INIA de las apenas 2 has. que pretendían dejarles si la transferencia del 27 de julio último con visos de corrupción se materializaba, seguirá posesionando cerca de 30 has., pues si hacemos un ejercicio de sumas y restas tenemos que el INIA primigeniamente posesionaba 66 has. de terreno, de los cuales ha cedido a favor de la UNSCH 7.5 has., para el campo ferial 9 has. y por derecho de vías y pasos 7.5 has., al Ministerio de Vivienda 5.1 has. y para fondo de bosque 2 has. (Denuncia interpuesta ante la Fiscalía del Medio Ambiente). En resumen, el INIA posesionaba, como reiteramos, 35 has., y si la donación al GRA para el futuro Hospital es el cedido al Ministerio de Vivienda, más el área que ocupa el campo ferial, no afectará absolutamente en nada la posesión actual del INIA, salvo que las 5 has. adicionales que solicitó el GRA fuese admitida, pero aun así la posesión del INIA bordeará las 30 has., una o dos hectáreas de más o menos está en el margen de las probabilidades.

Tercero, exigir y demandar al Ministro de Agricultura y al Gobierno Regional de Ayacucho, repotenciar y reflotar los trabajos de investigación, innovación y transferencia tecnológica que realiza el Centro Experimental Agraria CANAN-INIA, porque sin investigación en el campo agrario, estaremos cavando nuestra propia tumba como HUMANIDAD; la seguridad alimentaria es un necesidad impostergable para ésta y las futuras generaciones.

Cuarto, que el Presidente del GRA no siga tomando como escudo la construcción del nuevo Hospital que en el mejor de los casos si se logra el presupuesto correspondiente lo tendríamos en 3 o 4 años más, ojalá sea menos, pero eso no puede ser óbice para tener abandonado el Hospital Regional Miguel Angel Mariscal Llerena, donde más de 12 millones de Nuevos Soles hasta ahora invertidos, según el Ing. Edwin Gavilán López (Diario Regional La Calle. 04/10/2011), están a punto de echarse al agua si pretenden dejar tal como está (derruido en más del 40% de su infraestructura y un arbitraje en curso) y que la OCI y el Ministerio Público intervengan para una exhaustiva investigación; hospital que hasta la fecha tiene un haber negro de 14 muertes maternas a lo que la prensa oficialista se mantiene ciega para abordar el tema o se conforma con las explicaciones meramente oficiales.

Quinto, el estrés generado en el GRA el tema de los terrenos del INIA baje de intensidad y vuelquen todas sus fuerzas para no terminar este año en una vergonzante ejecución presupuestal de menos del 30%.

Y, sexto la iniciativa que está ganando cada vez más fuerza y cuerpo se haga realidad; que los terrenos del INIA, excluyendo las áreas que serán transferidos al GRA, sea destinado a un GRAN PARQUE NATURAL ECOLOGICO donde esté incorporado los trabajos de investigación, innovación y transferencia tecnológica que realiza la Estación Experimental Agraria CANAAN-INIA repotenciado y fortalecido; parque natural ecológico como existen en grandes ciudades que se proyectan con inteligencia al futuro en este proceso de calentamiento global; de no hacerlo, pocos años más el ambiente que respiramos será asfixiante, porque nos iremos ahogando de a poco por sembrar sólo fierro y cemento desdeñando las áreas naturales que nos dan vida; ésta ha sido y es nuestra defensa.

(*) Escrito para el diario regional "La Calle"

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